Concluye el Congreso Internacional de Ecumenismo en Wittenberg IEF
30 de agosto de 2017Destacada participación en el Congreso del responsable del Centro P. Congar, Prof. Andrés Valencia y del estudiante dominico Antonio Rafael Medialdea Villalba O.P. Entre los días 21 y 28 de agosto ha tenido en lugar el 44º Congreso Ecuménico de la Asociación Ecuménica Internacional IEF. Dicho Congreso ha tenido lugar en la ciudad alemana de Wittenberg, donde Martín Lutero estudió y enseñó teología, y donde formuló sus famosas 95 tesis, clavándolas en la puerta de la Iglesia del Castillo de Wittenberg. El lema del Congreso, “Descubriendo juntos el Evangelio, el verdadero tesoro de la(s) Iglesia(s)”, está basado justamente en la tesis número 62: “El verdadero tesoro de la Iglesia es el santísimo Evangelio de la gloria y de la gracia de Dios”.
Por las mañanas, después de una breve oración, hubo distintas conferencias, dos cada día. Estas nos situaban no solo ante los hechos ya logrados por el ecumenismo, sino también ante los desafíos que aún queda por afrontar. Después de dichas conferencias se establecía un breve diálogo entre los conferenciantes y los asistentes al Congreso. Johanna Rahner, Fernando Ens, Michael Welker son solo algunos de los grandes ponentes que enriquecieron dicho encuentro.
Dentro de estas conferencias cabe destacar la presentación por varios miembros de la IEF, y algunos invitados, como son Carmen Sarmiento, H.J. Jaschke, A. Noack, G. Steineck y P. Zimmerling que contaron su experiencia dentro de la IEF y el mundo ecuménico así como ilusiones ante el futuro de la misma. Esta mesa redonda estuvo moderada por D. Andrés Valencia Pérez, profesor de Ecumenismo en la Facultad de Teología san Vicente Ferrer de Valencia y, responsable del Centro P. Congar. D. Andrés ha sido hasta dicho encuentro presidente regional de la IEF en España. Actualmente sigue su compromiso con el ecumenismo como Vicepresidente de la IEF a nivel mundial.
Terminado el diálogo y el merecido descanso había distintos grupos de trabajo por lenguas para profundizar en lo dicho en la sala. Así mismo, se ofrecían unas preguntas orientativas con el tema del día para guiar las reflexiones. A primera hora de la tarde se realizaban los talleres, que han sido más de 25, donde los asistentes pudieron profundizar en temas ecuménicos como el diálogo entre la teología católica y protestante, el diálogo con el Islam, etc. Así como muchos en torno a la figura de Martín Lutero por el 500 aniversario de la Reforma, como fue el caso de un taller que trató las figuras de Lutero y santa Teresa de Jesús. Uno de los días en vez de los talleres se realizaron varias visitas a diferentes lugares: Torgau, Wörlitz y una panorámica de Wittenberg por el río Elba.
Cada confesión ponía al servicio de los otros sus dones y tesoros
Llegados casi al final de la jornada tenían lugar las diferentes liturgias de algunas de las confesiones cristianas presentes como La Cena del Señor de la tradición Luterano-Anglicana, la Liturgia Ortodoxa del Pan o la Eucaristía Católica-Romana. Eran momentos llenos de simbolismo y fraternidad, donde cada confesión ponía al servicio de los otros sus dones y tesoros. También hubo una Liturgia de la Reconciliación donde luteranos y católicos se pidieron perdón mutuamente, y agradecieron los dones del otro a Dios. Dichas liturgias tuvieron lugar en la Iglesia del Castillo de Wittenberg (Schlosskirche), en la Iglesia de santa María (Stadtkirche), perteneciente a la confesión luterana, y en la Iglesia de saint Marien, perteneciente a la confesión católica-romana. El domingo por la mañana tuvo lugar la Liturgia de Lima, presidida por el Rev. Dr. Olav Fykse, secretario general del Consejo Mundial de las Iglesias, acompañados por 10 obispos de diversas confesiones cristianas, incluso el obispo católico-romano emérito de Hamburgo; y por la noche el acto de clausura. Al final del acto se intercambiaron velas como signo de comunión entre los distintos participantes.
Nuestro hermano fr. Antonio Rafael Medialdea Villalba O.P., estudiante de la Provincia de Hispania, ha tenido la suerte de asistir y participar activamente en dicho Congreso. Esto ha sido en parte a unas becas concedidas por la IEF en España para jóvenes con inquietudes ecuménicas y como aliciente para trabajar en el campo ecuménico en un futuro.