En la mañana del sábado 1 de septiembre se celebró en la cuna de Santo Domingo, Caleruega, la profesión de los novicios Fr. Esteban Nko Sipi (ecuatoguineano) y Fr. Bernardo Sastre Zamora (vallisoletano), además de la renovación de la profesión de Fr. Antonio Rafael Medialdea Villalba (granadino) y Fr. Dailos José Melo González (canario).

  La celebración se realizó en el coro de las monjas contemplativas y fue presidia por el prior provincial de Hispania, Fr. Jesús Díaz Sariego, y concelebrada por el maestro de novicios y de estudiantes: Fr. Oscar Jesús González y Fr. Moisés Pérez Marcos. Acompañaron en la celebración frailes llegados de toda la provincia, jóvenes del Movimiento Juvenil Dominicano, miembros de la familia dominicana en España y familiares y amigos de cada uno de ellos.

Una historia de amistad con Dios

  En su homilía el provincial recordó a los frailes que el autor de la historia que se comenzaba a escribir es Dios, aunque cada uno es el protagonista y esto, en cierto sentido, es una historia de amistad con Dios, amistad que también se fragua y fortalece en la vida fraterna con nuestros hermanos y hermanas. Animó también a no tener miedo de los momentos de soledad en los que nos reconoceremos vulnerables y lo cambiaríamos todo por una caricia.

  Al finalizar la celebración, los novicios agradecieron a todas las personas que han sido partícipes de su historia vocacional: familiares, amigos, frailes, comunidades y en especial a sus formadores que durante este año les han ayudado a crecer y madurar en su proyecto dominicano.

  Por último, los asistentes se reunieron en el comedor de los frailes y allí pasaron de la misa a la mesa en un ambiente de alegría y gozo, fiesta y fraternidad en el que disfrutaron junto a estos hermanos, el don de ser llamados a formar parte de la gran familia que es la Orden de Predicadores.

Fr. Antonio Rafael, Fr. Dailos José, Fr. Bernardo y Fr. Esteban