Los cultos fueron presididos por el dominico segoviano Fr. Jesús María Hernández residente en Venezuela, y que nos hizo pasar un buen rato con su predicación honda y sencilla, como así lo atestiguaron los numerosos elogios que sobre sus palabras se podían escuchar a la salida de la Eucaristía.

Pero, además, la mañana del día 7, a las 11’30, se juntó un buen número de personas que, atendiendo a la invitación que se les hizo, pudieron conocer un poco más sobre la trayectoria de nuestro Padre Domingo , enmarcándolo en su contexto histórico, así como el significado espiritual de la Cueva Para ello, se contó con la participación de fray Javier Rodríguez, también segoviano , que fielmente acude a acompañarnos siempre en los cultos, y de Mercedes Flández profesora de Arte. Fue un buen momento en el que se intentaron resolver dudas o aclarar equívocos.

El nutrido grupo de personas que llena la Cueva siempre queda gratamente impresionada por el lugar, y no son pocos los que se preguntan por la escasa proyección que, tanto en Segovia como fuera de ella, hay de la misma. Creemos que iniciativas como la comentada pueden ayudar a solventar tal situación. Pero es sobre todo a la Familia Dominicana a la que le toca hacer de este lugar un centro que irradie el carisma que alimentó a nuestro Padre a favor de los más desfavorecidos.