Cuando el día 29 de julio por la tarde, los 91 Consejeros de Provincia y los Priores que formaban parte de los Consejos extraordinarios de la Junta Ibérica de Provincias, aprobaron por unanimidad la “Hoja de Ruta” del Proyecto 2016, algunos frailes comentaban que estábamos viviendo un acontecimiento histórico. Hubo dos entidades, la Provincia de Portugal y el Vicariato del Rosario, que manifestaron sus peculiaridades y especiales circunstancias, que no facilitaban una plena integración, aunque sí una plena colaboración. Ahora bien, dado que todas aprobaron el documento, todas las Provincias se comprometieron a seguir el itinerario que conlleva que, entre el 1 de noviembre y el 10 de diciembre de 2012, cada capítulo conventual y cada fraile se pronunciarán, con voto secreto, sobre la incorporación de su entidad a la nueva Provincia en el año 2016. En el capítulo provincial de 2013, cada entidad decidirá si propone al Maestro de la Orden su incorporación a la nueva provincia en 2016.

La Asamblea comenzó a las 10 de la mañana con la aprobación del Acta de la reunión de Consejos tenida en Ávila en mayo de 2011. A continuación cada entidad presentó sus tareas o deberes de cara al 2016 y las prioridades que quiere que estén presentes en el 2016. Después los consejeros se distribuyeron en 8 grupos de trabajo: 1) vida comunitaria y oración; 2) la predicación como misión central de los dominicos en España y Portugal; 3) aprender a envejecer; 4) los vicariatos; 5) pastoral juvenil y pastoral vocacional; 6) mística del estudio dominicano, tarea intelectual; 7) perspectivas de nuevos proyectos dominicanos en la Península Ibérica; 8) pastoral parroquial, santuarios, iglesias conventuales.

A las 13 horas tuvo lugar la Eucaristía, presidida por el Presidente de turno de la JIP, el Vicario del Vicariato del Rosario, fray Pedro Juan. Después de la comida se pusieron en común los resultados de las discusiones de los grupos de trabajo. Destacamos alguna de las ideas que surgieron: la predicación como tema preferente de la formación permanente; respetar la permanencia de los religiosos mayores en la comunidad donde han vivido, mientras sea posible; urgencia de una pastoral vocacional específica; preocupación por el futuro de los Centros de estudio; unificar ya la formación permanente de todas las Provincias; nuestra presencia en los santuarios requiere de frailes capacitados para la acogida y la escucha, así como para conectar con la religiosidad popular; los Centros de Familia deben ir más allá de una pastoral de mediación (que supone conflicto) para abrirse a una pastoral familiar, prematrimonial y matrimonial; la importancia de la predicación a los “alejados” y de hacernos presentes entre los no creyentes.

La Asamblea terminó con unas palabras de agradecimiento a la comisión “Proyecto 2016” por el buen trabajo realizado por parte del Presidente de turno, ratificadas por el aplauso de todos los presentes. El Presidente también agradeció la tarea del P. Juan Almarza como moderador y la del P. José Parra como secretario. Tras cantar la Salve y el Oh lumen se dio por terminada la Asamblea.