La Escuela de Salamanca, cuna de la teoría económica
27 de octubre de 2009El Instituto Von Mises de EEUU, uno de los "think tank" más importantes en el panorama de las ciencias sociales, organizó un congreso sobre la Escuela de Salamanca y el origen de la moderna teoría económica, en colaboración con el Instituto Juan de Mariana y la cátedra de Economía Austriaca de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.
Desde hace ya décadas se viene prestando una mayor atención -convirtiéndose casi en oficial en muchos segmentos de la historia del pensamiento económico- al papel decisivo que la escolástica salmantina jugó en el desarrollo de la moderna teoría económica. Y este congreso lo quiso ratificar en su misma "cuna": la ciencia económica no nace con Adam Smith en su célebre libro, "La riqueza de las naciones", (tesis luego divulgada por Max Weber) sino que arranca del pensamiento cristiano, pasando por la filosofía de S. Tomás y sistematizada por la Escolástica de los dominicos Francisco de Vitoria, Domingo de Soto, Martín Azpilcueta y Tomás de Mercado, entre otros. Sumada a la obra de jesuitas como Lessio y Juan de Mariana (quedan todavía más autores por destacar).
Las razones de tal conclusión provienen del análisis histórico y doctrinal. Todos ellos, a su manera y no siempre en progresión lineal, asumieron el valor subjetivo de los bienes (punto central de cualquier economía moderna); desarrollaron una teoría de los precios y una explicación de la inflación, junto a un análisis del papel del dinero; tuvieron una teoría de los tratos y contratos y establecieron, a través de la ley natural, los límites al poder de cualquier gobierno. Uno de los momentos más importantes del congreso fue cuando el catedrático de la Universidad Rey Juan Carlos, Jesús Huerta de Soto -no exento de una fina ironía- dentro de una exposición brillante dice: "...así, el origen de la economía moderna no es protestante ni anglosajón, sino católico y español" (aplausos de toda la asamblea, mayoritariamente de habla inglesa).
Un congreso es más que un laboratorio de ideas, también puede servir para el reencuentro de antiguos amigos, en este caso, de dominicos. Vino de Guatemala al congreso Amable Sánchez Torres, profesor y poeta, quien hace cuarenta años dejó Salamanca. Aquí se reencontró con sus antiguos profesores y compañeros. Tuvo palabras emocionadas de agradecimiento para la comunidad y la Orden por la formación que en este bello convento recibió.
En nombre del Instituto Von Mises y de todos los organizadores quiero agradecer, una vez más, a la comunidad de San Esteban, a la Facultad de Teología y en especial a Fr. Manuel Ángel, OP, su decano, toda su colaboración.
Con este congreso, inauguramos, también, en la Sala Capitular, los modernos equipos de audio e imagen (de última generación), que esperamos sirvan para mantener la reflexión intelectual muy alta, tal cual hicieron nuestros teólogos del siglo XVI.
Fr. Rodrigo Hidalgo T., OP