La Facultad de Teología San Vicente Ferrer de Valencia presentó oficialmente la nueva Cátedra Yves Congar el 16 de diciembre de 2020. Para la ocasión se invitó al antropólogo, teólogo y escritor jesuita Javier Melloni.

La nueva Cátedra de la Facultad de Teología San Vicente Ferrer trata de buscar el diálogo por la unidad de los cristianos y de conseguir un espacio de estudio como servicio a los alumnos y también como servicio a la Iglesia diocesana.

En la puesta de largo de esta nueva institución investigadora intervino desde la distancia el Provincial de la Orden de Predicadores de Hispania y Vice Gran Canciller de la Facultad de Teología de Valencia, Jesús Díaz. La imposibilidad de salir de su convento a causa de la pandemia hizo que el Prior de los Dominicos de Hispania enviara un escrito dedicado al inicio de la andadura oficial de la Cátedra de ecumenismo Yves Congar. También participaron, con respectivos discurso,  el Decano Presidente de la Facultad de Teología, que acoge la institución, Vicente Botella; y el primer director de la Cátedra, el laico Andrés Valencia.

Javier Melloni, conocido por ser un teólogo que reflexiona, practica y teoriza en torno al diálogo interreligioso, tras los discursos oficiales ofreció la conferencia El encuentro con el otro como teofanía. La teofanía del diálogo. La charla resultó muy interesante, como demuestra los más de 40 minutos de debate que se produjo a partir de las preguntas de las personas que siguieron la conferencia, tanto de forma presencial en el salón de actos de la Facultad de Teología San Vicente Ferrer, como a través del canal de YouTube de la Facultad.

La Cátedra Yves Congar tiene el objetivo de convertirse en un espacio de reflexión, investigación y estudio en el diálogo ecuménico, teniendo en cuenta siempre de fondo la eclesiología del Concilio Vaticano II, de la que el Padre Congar fue uno de los grandes pensadores.

Asistentes a la presentación de la cátedra Yves Congar

El propio reglamento de la Cátedra, recuerda el director Andrés Valencia, apunta que “nace del convencimiento de la actualidad, interés y urgencia de la temática ecuménica e interreligiosa, puesta de manifiesto por el magisterio de la Iglesia desde el Concilio Vaticano II y recogida últimamente en la Constitución apostólica del papa Francisco Veritatis Gaudium, y a la encíclica Frattelli Tutti:

La Iglesia valora la acción de Dios en las demás religiones, y «no rechaza nada de lo que en estas religiones hay de santo y verdadero. Considera con sincero respeto los modos de obrar y de vivir, los preceptos y doctrinas que […] no pocas veces reflejan un destello de aquella Verdad que ilumina a todos los hombres» (NA 2). Pero los cristianos no podemos esconder que «si la música del Evangelio deja de vibrar en nuestras entrañas, habremos perdido la alegría que brota de la compasión, la ternura que nace de la confianza, la capacidad de reconciliación que encuentra su fuente en sabernos siempre perdonados‒enviados. Si la música del Evangelio deja de sonar en nuestras casas, en nuestras plazas, en los trabajos, en la política y en la economía, habremos apagado la melodía que nos desafiaba a luchar por la dignidad de todo hombre y mujer» (FT277).

Fuente: Facultad de Teología San Vicente Ferrer