El cardenal Osoro ordena a tres sacerdotes dominicos en la Basílica de Atocha
21 de junio de 2021Este sábado 19 de junio tres frailes dominicos de la Provincia Hispania han sido ordenados sacerdotes por la imposición de manos del cardenal arzobispo de Madrid, Mons. Carlos Osoro Sierra, en la Basílica Nuestra Señora de Atocha de Madrid.
Los ya ordenados sacerdotes son fray Salvador Becoba Raso, O.P., fray Jesús Nguema Ndong Bindang, O.P. y fray Néstor Rubén Morales Gutiérrez, O.P.
Además de don Carlos Osoro, han acompañado a los nuevos sacerdotes el prior provincial de la Provincia Hispania, Fr. Jesús Díaz Sariego; el prior del convento de Atocha, Fr. Iván Calvo Alonso; multitud de frailes dominicos, y de familiares, amigos y otros miembros de la Familia Dominicana. La ceremonia ha sido transmitida en directo por YouTube y la han podido vivir en la distancia más de 1.000 personas, especialmente desde Guinea Ecuatorial y Cuba, países de Salvador, Jesús y Néstor. Aunque también ha sido seguida desde lugares como Francia, Italia, Argentina, República Dominicana, Estados Unidos o México.
Predicación, testimonio, caridad
En su homilía, el titular de la Archidiócesis ha instado a los ordenandos a compartir la misión de Jesucristo. “La Palabra nos está invitando a compartir la misión apasionante de Jesucristo. Una misión, que vosotros, como dominicos después de 800 años habéis afianzado desde la predicación, el testimonio y la caridad. Tres pilares que afianzan el futuro de la vida, no solamente de vuestra misión”.
Don Carlos les ha pedido que se pongan al servicio de los demás siempre, de todos los hombres, en especial de los que más lo necesitan. “Dios impulsó a Sto. Domingo a fundar una Orden de Predicadores, siendo la predicación la misión que Jesús encomendó a los Apóstoles. Esta experiencia en santo Domingo ha sido radical, y lo ha sido a través de toda la historia de la Orden de Predicadores. Santo Domingo recordaba siempre que primero hay que contemplar y luego salir a enseñar”.
Compartir la misión siendo amigos de Jesús
Asimismo, el Arzobispo ha señalado que “el Señor no solamente nos está invitando a todos a compartir la misión, quiere que lo hagamos viviendo y mostrando ese amor a todos los hombres, quiere que lo hagamos siendo amigos de Jesús, amigos que tienen 7 claves: permaneced en su amor, habéis experimentado en vuestra vida esta elección para anunciar su amor; guardando sus mandamientos, que se resumen en amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a uno mismo; viviendo en su alegría, la alegría que experimentáis en vuestra vida porque sin ser los mejores o los más grandes habéis sido llamados por Cristo; amándoos unos a otros, viviendo en comunidad; dando la vida, en cualquier lugar donde estéis, donde os manden; mostrando que sois amigos de Jesús, con vuestro propio testimonio, con vuestra propia vida y los pies descalzos, y con compasión, “¿Cómo puedo estudiar con pieles muertas cuando la carne de Cristo sufre?” es la pregunta que se hacía santo Domingo, es el grito de los pobres y los descartados que nos hace comprender que la compasión de Cristo nos la regala para que la entreguéis a todos los hombres”.
Por último, el Cardenal les ha recordado que “el tiempo presente es el mejor para vosotros, es el que nos ha dado Jesucristo. Es en el que tenéis que vivir vuestro ministerio y vuestro carisma. Es necesario que nosotros salgamos a la realidad concreta de la gente, en las situaciones que está hoy”.
Para concluir la ceremonia, Fr. Jesús Nguema, ha tenido unas palabras de agradecimiento en nombre de los tres nuevos sacerdotes: “Hoy nuestro corazón rebosa de gratitud y de alegría por la gracia con la que hemos sido colmados, y por el gran don del ministerio sacerdotal que Dios nos ha concedido”. También Fr. Néstor y Fr. Salvador han dedicado unas breves palabras. Este último hizo resonar en la basílica el grito ecuatoguineano de “¡Yeyeba!”, con el que en su país terminan las celebraciones importantes.
Fr. Jesús Díaz Sariego se ha querido sumar a los agradecimientos y ha dedicado a unas palabras a los tres dominicos, reconociendo que en las cartas que ha recibido de ellos, solicitando ser admitidos al orden de los presbíteros, han reflejado muy bien la experiencia que están viviendo: “Jesús, tú decías en tu petición que quisieras realmente masticar la palabra de Dios, para ser como sacerdote, como dominico, un buen mediador entre Dios y el mundo, entre los hombres y mujeres de este tiempo y Dios. Salvador, en tu carta me decías, citando al Evangelio «pasó haciendo el bien», que ese realmente sea el lema de tu sacerdocio, pasa haciendo el bien, ejerciendo el ministerio. Y Néstor, citando al apóstol, en tu carta decías «sé de quién me he fiado»; la confianza en tus hermanos, la confianza en Dios en primer lugar, en ti mismo, te ayudará, sin duda alguna, a ejercer bien el ministerio sacerdotal”.