El martes 18 de febrero, en el Aula Magna del Convento San Esteban de Salamanca, tuvo lugar la charla de clausura de las Conversaciones de San Esteban, a cargo de Mons. Atilano Rodríguez.

 

  La primera parte de la charla, para enmarcar los desafíos actuales de la misión de la Iglesia, y de su Doctrina Social en particular, describió los efectos de la crisis social y económica que la sociedad española ha tenido que soportar desde el año 2008, con el inicio de la crisis económica a nivel mundial.

  La labor de la Iglesia, a través de Cáritas y del voluntariado social, tuvieron un papel fundamental para ayudar a amortiguar los aspectos adversos y negativos que toda crisis económica trae; los más evidentes y conocidos son: la cesantía y la marginación, y con ellos la crisis en todo el tejido familiar y social. Monseñor Atilano se preguntó si esta crisis, la última vivida de estos periodos cíclicos del sistema económico y político, es coyuntural o estructural, es decir, si estamos propensos a repetirlas en cualquier momento; todo indica, lamentablemente, que se puede volver a recaer. Las consecuencias de lo anterior, según un informe estadístico mencionado, son todavía preocupantes y persistentes, más de un millón de personas (el cuatro por ciento de la sociedad) vive todavía en la exclusión social, denominada como "la sociedad expulsada" del bienestar. En medio de todo esto, el ponente llamó a que los cristianos nos comprometamos en la transformación de la sociedad, aportando los valores del Evangelio en la consecución de una sociedad más justa. Una referencia importante se hizo al reciente congreso de laicos, "Iglesia en salida", pues a ellos les corresponde el trabajo por una sociedad que se parezca más a la de Jesús.