Aunque las clases comenzaron el miércoles, 28 de septiembre, la solemne ceremonia inaugural del curso 2011-2012 en la Facultad de Teología de Valencia tuvo lugar el martes, 4 de octubre. Los actos fueron presididos por el Gran Canciller, el Arzobispo de Valencia, y el Vice-Gran Canciller, el P. Esteban Pérez Delgado, provincial de los dominicos de la Provincia de Aragón. A los distintos actos asistieron, amen de los alumnos y profesores de la Facultad, distintas autoridades civiles y académicas, como la Directora General de Educación de la Generalitat Valenciana, el Rector de la Universidad Católica y la vice-rectora de la Universidad Cardenal Herrera.

A las 10.30 tuvo lugar la celebración de la Eucaristía. Con el Arzobispo de Valencia y el Provincial de los dominicos, concelebraron el Decano de la Facultad, Profesor Juan Miguel Díaz Rodelas, y el Vice-decano, fray Vicente Botella Cubells, O.P. La proclamación del evangelio, así como las preces de la oración de los fieles estuvieron a cargo del diácono dominico, alumno del Ciclo de Licenciatura, fray Alejandro López Ribao. En el momento de las intercesiones de la plegaria eucarística, el Sr. Decano, D. Juan Miguel Díaz Rodelas, tuvo la elegancia de nombrar a Santo Domingo de Guzmán, junto al santo del día, San Francisco de Asís, y al patrono de la Facultad, San Vicente Ferrer. En la homilía, el Sr. Arzobispo presentó un contraste entre el conocimiento informativo y el formativo que cambia la vida; entre un uso de la razón cerrado a lo sobrenatural, que conduce a una exégesis que absolutiza métodos no adecuados para alcanzar ciertas realidades, y un uso de la razón que reconoce su medida y se abre a la acción de Dios.

El acto académico comenzó con un saludo del Decano que, citando a la constitución Sapientia Christiana, afirmó que las Facultades de Teología, que se ocupan de la Revelación, están más estrechamente unidas a la misión evangelizadora de la Iglesia. La lección inaugural la pronunció el Dr. Jaime Sancho Andreu y versó sobre “la unidad de la iniciación cristiana”. Se refirió a las implicaciones ecuménicas del tema; citó al gran teólogo dominico Edward Schillebeeckx al afirmar que el sacramento originario es Jesucristo; e indicó que el acercamiento teológico a la “iniciación” cristiana debe ser antes cristológico que eclesiológico, hasta el punto de que no son los sacramentos los que nos capacitan para el encuentro, sino que es Jesucristo el que crea esas capacidades.

Los actos del día concluyeron con un vino de honor en el claustro de la Sede Central de la Facultad.